Diseños para todos > Clásicos Inadvertidos: Pajita con doblez

Una señora muy célebre en un conocido relato de realismo mágico latinoamericano usaba una pajita con doblez para beber el café con leche y no borrarse el rojo de los labios. La utilidad de la pajita en ese mundo de fantasía no es óbice para recordar algunas de las utilidades concretas de la pajita desde su invención.

Fue el inventor norteamericano Joseph Friedman quien en la década de los años treinta del siglo pasado dedicó sus esfuerzos a mejorar el funcionamiento de las plumas estilográficas, una invención que vendió a Sheaffer. También dedicó su tiempo a la invención y patente de otras utilidades como la pajita con doblez.

Observando a una niña pequeña se dio cuenta de lo difícil que era para la niña beber con la pajita rígida tradicional. Se le ocurrió entonces hacer unas muescas y unas adaptaciones en el papel de una pajita clásica para hacerla doblarse y poder así localizar el punto exterior de la pajita a una altura graduable, facilitando el uso de la misma para bebés, personas tumbadas o simplemente para no usar las manos al beber. Antes de la pajita doblada existía la rígida. La evolucionada se empezó a manufacturar por la compañía “Flexible Straw Corporation” en 1939. Y desde 1949 la pajita se empezó a distribuir en hospitales para acceder después al mercado general.
El originario Friedman dio paso, sobre todo en los años setenta durante la moda del flúor de color, a unas pajitas hechas con enormes nudos psicodélicos que cumplían una función retórica pero bella. Esos nudos no tenían nada de funcional pero hacían las delicias de los jovencitos y fueron muchos los diseñadores como Fiorucci quienes incluían en su estética las locas formas disco de las pajitas. La utilidad de las pajitas tiene variedad de perfiles:

• Es un método muy higiénico para beber.

• Es cómodo por las posibilidades que permite.

• Es un diseño clásico en constante renovación de colores y estampados.